Devocional | ¿Qué significa ser cristiano?
- Enmanuel Cruz
- 25 feb 2017
- 3 Min. de lectura
Hechos 11:26 Y se congregaron allí todo un año con la iglesia, y ENSEÑARON a mucha gente; y a los DISCÍPULOS se les llamó CRISTIANOS por primera vez en Antioquía.

¿Qué significa ser cristiano?
Hoy en día hay mucha confusión y mucha trivialidad con respecto al sentido de esta palabra. Muchas personas dicen que son cristianos simplemente porque fueron bautizados. Pero si no hay nada más, solo se trata de una etiqueta.
La palabra cristiano (viene del griego "Christianous"), y tiene al menos una desinencia latina, ya que el vocablo griego derivado de Christós sería christeios. La desinencia ianos, iano indica habitualmente a los esclavos, partidarios o seguidores de algún hombre célebre: cesarianos, pompeyanos, flavianos, ciceronianos, herodianos, neronianos...
Un cristiano es un esclavo, seguidor, de Cristo "un discípulo de Cristo".
Hechos 11:26 Y se congregaron allí todo un año con la iglesia, y ENSEÑARON a mucha gente; y a los DISCÍPULOS se les llamó CRISTIANOS por primera vez en Antioquía.
Hechos 26:28 Entonces Agripa dijo a Pablo: Por poco me persuades a ser cristiano.
Los discípulos que recibieron la enseñanzas de Cristo y permanecen en ella son los verdaderos Cristianos.
Un cristiano es un discípulo de CRISTO.
Un discípulo es uno persuadido y comprometido a seguir un maestro para aprender e imitar su vida y permanecer en su doctrina o enseñanza y transmitirla.
Juan 8:31 Dijo entonces Jesús a los judíos que habían creído en él: Si vosotros permaneciereis en mi palabra, seréis verdaderamente mis discípulos; (1 Juan 2:3-6).
Para ser un cristiano o discípulo de Cristo, en primer lugar se debe creer en Jesucristo, aceptarlo personalmente como Señor y Salvador (Romanos 10:8-10), es necesario nacer de nuevo (Juan 3:3), es decir, poseer la vida eterna. Todos los que reconocen que son pecadores y se arrepienten y creen que Jesús, al morir en la cruz, sufrió en su lugar el juicio que merecían, pueden recibir por gracia vida eterna.
El cristiano o discípulo de Cristo que es nacido de nuevo (Juan 1:12-13, 3:3, Romanos 8:14-16), tiene una nueva identidad en Cristo. Identidad forjada por la morada del Espíritu Santo en cada creyente y que produce el carácter de Cristo en el discípulo, esto también se conoce como el fruto del Espíritu.
Es grave atribuirse el nombre de cristiano sin tener esta nueva identidad en Cristo que es la vida de Dios, sin preocuparse de Cristo, sin vivir por fe la vida de Cristo. El que hace tal cosa lleva una etiqueta que no refleja la realidad de Cristo en su vida.
Cada cristiano debe saber claramente quién es. Debe conocer su nueva identidad en Cristo. Y reflejar el carácter de Cristo en su vida que es el fruto del Espíritu.
Juan 14:15 Si me amáis, guardad mis mandamientos.
Juan 13:34-35 Un mandamiento nuevo os doy: Que os améis unos a otros; como yo os he amado, que también os améis unos a otros. En esto conocerán todos que sois mis discípulos, si tuviereis amor los unos con los otros.
Gálatas 5:22-23 Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley.
1º de Juan 2:3-6 Y en esto sabemos que nosotros le conocemos, si guardamos sus mandamientos. El que dice: Yo le conozco, y no guarda sus mandamientos, el tal es mentiroso, y la verdad no está en él; pero el que guarda su palabra, en éste verdaderamente el amor de Dios se ha perfeccionado; por esto sabemos que estamos en él. El que dice que permanece en él, "DEBE ANDAR COMO ÉL ANDUVO".
¿Eres un verdadero cristiano?
¿Hasta tenido un encuentro personal con Jesucristo?
¿Estas dispuesto a seguir a tu Señor, Salvador y Maestro y a honrarlo con tu vida en cada momento y circunstancia?
¿Tu vida antigua fue crucificada y sepultada juntamente con Cristo y se encuentra escondida en el, de modo que ya no vives tu, sino Cristo en ti?
¿Estas llevando los frutos de un verdadero discípulos de Cristo?
Si en verdad eres un cristiano, honra y glorifica a tu Señor en tu vida y con tu vida, refleja el carácter de Cristo en ti lleva sus frutos, testifica de él con tu vida.
Si aún no tienes a Cristo en tu vida, si no has tenido ese encuentro personal y genuino con el, ven a él en arrepentimiento y con fe.
(Enmanuel Cruz).